EEUU, la industria de armas
pierde apoyo
En 2011 el mercado de armas
generó $31 840 millones en EEUU
Las acciones del fabricante
de armas Smith & Wesson Holding cayeron un 5%. El desplome comenzó el
viernes, conforme se fue conociendo el alcance de la masacre
El fondo de inversión Cerberus, uno de los más grandes del mundo, anunció ayer que venderá su participación en Freedom Group, la empresa fabricante del fusil semiautomático usado en la matanza de la escuela Sandy Hook, en Newtown.
En
un comunicado Cerberus anunció que la tragedia de Sandy Hook ha sido un punto
de inflexión que ha intensificado el debate sobre el control de armas, a un
nivel sin precedentes.
La
firma explica que invirtió en 2006 siguiendo criterios financieros y que, si
bien la cuestión del control de armas debe ser tratada por gobernantes y
legisladores, hay acciones que sí se pueden generar desde la compañía.
Por
lo tanto, la empresa ha decidido emprender, de forma inmediata, un proceso
formal para vender la acciones que la relacionan con Freedom Group.
El
fondo compró en 2006 Bushmaster, la empresa fabricante del rifle semiautomático
modelo AR-15 usado en la matanza en la escuela, y luego fusionó esa empresa con
otros fabricantes de armas para crear una más grande: Freedom Group.
Cerberus,
con sede en Nueva York, es uno de los mayores fondos de inversión en todo el
mundo y gestiona una cartera de más de $20 000 millones.
Freedom
Group tiene su sede en Madison (Carolina del Norte) e incluye marcas como
Remington, Bushmaster o Marlin, y registró unas ventas de $677,3 millones en
los nueve primeros meses de este año, con un aumento del 20%, respecto al mismo
período del año anterior.
Según
el diario español El País, esta semana los títulos del fabricante de armas
Smith & Wesson Holding cayeron un 5%. El desplome comenzó el viernes,
conforme se fue conociendo el alcance de la masacre en Newtown y sus
consecuencias en las leyes que regulan la posesión.
El
año que está a punto de concluir fue muy bueno para las compañías que venden
armas de uso civil en EEUU. Solo hay que fijarse en la evolución bursátil en
los últimos 12 meses de Smith & Wesson, cuyos títulos subía un 160%, tras
Barack Obama ser reelegido presidente, cuando alcanzó los $11,25.
La
misma tendencia se observó en Sturm Ruger, el otro gran fabricante que cotiza.
En su caso, su capitalización bursátil se dobló prácticamente desde los $31 con
los que empezó 2012.
Y
como su rival en esta lucrativa industria, tras la masacre, registra una
importante corrección, por cómo podría acabar afectando a las ventas de
armamento en el futuro en EEUU.
Newtown
tiene a uno de los mayores grupos de presión que defiende la posesión y el uso
de armas. La Fundación Nacional de Tiro Deportivo cuenta con más de 7 000
miembros, entre ellos, fabricantes de armas, distribuidores, tiendas y
publicaciones. Ellos no han hecho comentarios sobre el efecto de la masacre en
el negocio de sus socios.
De
acuerdo con esta organización, la industria de armas de fuego movió $31 840
millones el pasado año. Le atribuyen cerca de 209 700 empleos, de los que unos
98 000 son directos, y la generación de casi 500 millones en impuestos. Su
portal indica que la remuneración media es de $46 860. El empleo allí creció
30% desde 2008.
Según
el diario, los números reflejan el apetito de los estadounidenses por las armas
de fuego. Hay 300 millones en circulación. Es la mayor concentración de armas
privadas en el mundo. La mitad son guardadas en las casas como si fuera un
cuchillo. (EFE)
Los alumnos de
las seis escuelas de Newtown regresan a las aulas bajo vigilancia policial
Las
escuelas de Newtown abrieron ayer de nuevo sus puertas, menos el centro
educativo Sandy Hook, escenario del tiroteo.
Tras
la masacre ocurrida la semana pasada, todos los centros educativos de esta
pequeña ciudad del noreste de EEUU cerraron sus puertas por precaución mientras
se investiga el tiroteo.
Cinco
días después de que el joven de 20 años Adam Lanza irrumpiera en la escuela y
asesinara a 20 niños de entre 6 y 7 años de edad, así como a seis adultos,
antes de suicidarse, el edificio continúa cerrado.
Lanza
había matado a tiros, previamente, a su propia madre.
Según
explicó el jefe de la policía estatal de Connecticut, Paul Vance, la
investigación sobre la escena del crimen aún está en curso y podría durar
meses. No se descarta la posibilidad de que la escuela no vuelva a abrir nunca.
El
gran enigma que las investigaciones aún no han despejado es el móvil que llevó
al joven Lanza, quien no dejó notas ni cartas previas, a asesinar a su madre en
su propia casa y después irrumpir a balazos en una escuela elemental con la
que, al parecer, no tenía ningún vínculo.
Mientras
tanto, los alumnos de la escuela elemental Sandy Hook utilizarán las
instalaciones de otro edificio escolar, Chalk Hill, que está en desuso en la
vecina localidad de Monroe.
La
Policía de Newtown tuvo agentes en las seis escuelas que reabrieron en la
mañana de ayer para proporcionar seguridad a los más de 4 700 estudiantes que
han vuelto a las aulas.
Tras
la masacre, se ha reabierto el debate sobre la conveniencia de tener seguridad
armada en los centros educativos de primaria.
Debido
al tiroteo, las escuelas de uno de los distritos de Pensilvania recibieron
durante este fin de semana el permiso judicial para que los guardias de
seguridad pudieran llevar pistolas a partir de ayer, tal y como solicitaron a
inicios de este mes, antes de la masacre de Newtown.
Fuente:
El Hoy
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