Caen primeras lluvias invernales

Con optimismo, en el sector agrícola del Guayas, recibieron las primeras lluvias de la presente estación invernal. Sin embargo, existe una alerta constante para ver cómo se presenta el escenario en las próximas semanas.

Absalón Gómez, agricultor de la zona de Tarifa (Samborondón), confía en que las condiciones del invierno sean normales y les permita manejar las cosechas sin sobresaltos. “En todas estas zonas lo que más se afectan son los arrozales cuando se van los muros”.

En cambio, en el área urbana de Guayaquil, las primeras lluvias, iniciadas de manera esporádica las dos últimas semanas de diciembre, dejan preocupación, sobre todo en los barrios periféricos de la urbe. El viernes por la noche cayó el primer aguacero del 2013.

Por ejemplo, en la calle principal del sitio conocido como La Ladrillera, en el noroeste, charcos de agua se ven en su calle principal.

Sus moradores se quejan de la falta de obras y les preocupa que, por el taponamiento de las alcantarillas, como ocurrió el invierno pasado, sus casas queden bajo el agua. Por allí se accede a zonas periféricas como Ciudad de Dios, Monte Sinaí, donde se carece de servicios básicos y tienen calles solo de tierra.

Por la avenida Las Iguanas, desde donde se va al relleno sanitario de la ciudad y a sectores populares como Flor de Bastión, el agua se mantiene empozada. En la cooperativa Juan Pablo II, varias calles están llenas de agua.

En varios lugares, cuadrillas del departamento municipal de Obras Públicas luchan contra el tiempo. Cumplen un programa de recapeo. En varios de los casos existen calles que tienen más de un mes a la espera del asfalto, como por ejemplo la Víctor M. Rendón desde el Malecón hasta Escobedo.

Al momento las condiciones en que se presenta el invierno en el Litoral, en especial en Guayas, son calificadas como normales.

“Hace tres meses venimos informando que tendremos un invierno leve y moderado. Las condiciones actuales son neutrales; la temperatura del mar está normal para la época y mantenemos la perspectiva que será un invierno cuasi normal”, expresó Rafael Cabello, director del Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar).

Explicó que las precipitaciones que se vienen dando en el Litoral están motivadas por las grandes masas de aire caliente, con una alta humedad, que provienen desde la región Amazónica. “Con el paso de los días el mar se va a ir calentando más y eso va a generar evaporación y también va a producir lluvias”.

Cabello descartó la posibilidad de que se presente un fenómeno de El Niño en todo el Pacífico. “Lo de El Niño era un pronóstico que se originó en junio pasado donde se apuntaba a una mayor probabilidad en la mitad del océano Pacífico y como lo informamos hace tres meses, esa posibilidad está totalmente descartada”.

Esta aseveración es similar a la de José Luis Santos, coordinador del programa para el cambio climático de la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol). “Nosotros, hace varios meses, habíamos descartado la presencia de El Niño y La Niña. Ahora se espera es que se presente un invierno relativamente de normal a fuerte, como los que hemos tenido los últimos años”, dijo.

Según Santos, se espera un invierno con un patrón similar al 2012, con lluvias irregulares, con períodos de dos a tres semanas con lluvias intensas y luego una o dos semanas con ninguna o escasas precipitaciones.

El especialista recordó que el año anterior el invierno se atrasó y se inició en la segunda semana de enero. “Normalmente, hace 20 años y más, las lluvias comenzaban en diciembre. El comportamiento actual está dentro de lo tradicional. Lo que ocurre es que en los últimos 10 años no habíamos tenido una regularidad en ese sentido”.


La Sierra con clima cálido

La región Sierra ha tenido diferentes comportamientos respecto a lluvias en este inicio de año. Aunque es prematuro medir el comportamiento del clima, el Inahmi tiene estadísticas de estos días.

Quito ha tenido precipitaciones de 0,3 y se tiene previsto que hasta final de mes esta medición llegue a 79,9. En Cuenca, las precipitaciones bordean 3,4 y se prevé que llegue a 54,8 durante el primer mes del año. Ibarra va en 1,7 y se prevé que llegará a 30,9.

La ciudad donde sí se han presentado lluvias fuertes es en Tulcán, donde las precipitaciones llegan a 15,5 y lo previsto, hasta final de mes, es 69,1, explica la técnica del Inahmi, Elizabeth Vélez. Estos quiere decir que, excepto en Tulcán, ha habido lluvias ligeras y moderadas.

En Cuenca ha llovido y eso se refleja en el aumento de la cota de las represas. El 4 de enero en Mazar ingresaron 382 metros cúbicos de agua por segundo, mientras que en un día con escasas lluvias ingresan 50 metros cúbicos por segundo.
 
Fuente: El Comercio

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